Titulares

lunes, 3 de diciembre de 2018

Un pacto que anularía la Soberanía Nacional


Por Víctor Peña 

En todos los países del mundo donde existe fronteras tienen como prioridad el resguardo y el celo de la misma, sin importar el grado de amistad que tengan los países fronterizos. 

En nuestro caso la frontera que nos separa de los hermanos haitianos, es todo lo contrario, cualquiera que tenga dinero sin importar que tenga una documentación o no, puede pasarla sin ningún contratiempo, se supone que las fronteras solo se cruzan por las aduanas y teniendo una serie de documentos en regla principalmente un pasaporte al día y una visa. 

Pues para cruzar desde Haití a la República Dominicana lo indispensable es el dinero, esto para los que le toque la mala suerte de encontrarse con algunos guardias que supuestamente patrullan esta franja divisoria entre ambos países, y en mucho de los casos fruto de la escasa vigilancia se pasa sin ningún problema. 

Lo más grave aún es que las cosas van de mal en peor porque un grupo de dominicanos fue secuestrado en territorio dominicano, por una turba de haitianos y los escasos guardias que estaban a los alrededores no podían hacer nada según sus propias palabras o sea que no podían defender a los dominicanos. 

Ahora la amenaza más grave para nuestro país, porque pone en juego nuestra Soberanía Nacional es el acuerdo o Pacto Migratorio Mundial que lleva a cabo la ONU y que la República Dominicana atravez de nuestra Cancillería pretende firmar este 11 de diciembre, todo disfrazado de un marco de cooperación no vinculante. 

Habría que investigar porque los Estados Unidos y otros países tales como: Alemania, Polonia, Australia, Austria, Hungría, República Checa, y Bulgaria se niegan a firmar ese pacto. 

La verdad que es que ese Pacto Mundial para la Migración, va a limitar a los países a ejercer su soberanía y nuestro caso en particular tendríamos que soportar una invasión pacífica de por lo menos 5 o 6 millones de haitianos que viven en la extrema pobreza en su país, aparte de los cerca de dos millones que ya están dentro de nuestro país. 

Entonces la gran pregunta sería, qué beneficio nos ofrece ese pacto­­, la verdad es que ese pacto solo beneficiaría a Haití, porque tendríamos que abrir las fronteras para que los haitianos entren a nuestro país como si fuera el fuera el suyo, pero más aún nosotros deberíamos asumirlos como dominicanos.

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