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domingo, 21 de septiembre de 2025

Por Lisandro Prieto Femenía
Diario Azua / 21 septiembre 2025.-

“La violencia es el miedo a los ideales de los demás”. Mahatma Gandhi

La reciente noticia del asesinato de Charlie Kirk nos golpea como un hecho que es íntimo y público al mismo tiempo: íntimo porque su vida- con su historia, proyectos, familia y afectos- se apaga para siempre y público porque su muerte se inscribe en un espacio político saturado de tensión, retórica agresiva y prácticas que han ido normalizando la violencia sistémica. Si aceptamos que la política no es sólo un discurso sino también disposición de fuerzas y permeación moral, entonces conviene preguntarnos cómo hemos llegado a este punto decadente y qué significan, filosóficamente, estos actos deplorables. En pocas palabras, queridos lectores, hoy nos proponemos leer un crimen en clave de violencia sistematizada y naturalizada, atendiendo a ciertas reflexiones que nos ayuden a iluminar sus raíces culturales, mediáticas y éticas.

Para comprender la normalización de la violencia, es preciso asumir el proceso de lentificación del asombro: vivimos en la tendencia a que lo sorprendente se haga cotidiano. Al respecto, Hannah Arendt, en su obra “Sobre la violencia” (1970), distingue cuidadosamente entre poder y violencia y declara que “el poder y la violencia no son la misma cosa, y cuando se agota el poder, la violencia emerge como sustituto” (Arendt, 1970, p. 44). En este sentido, Arendt nos está alertando sobre la degradación del espacio político, sobre todo cuando la violencia aparece como un medio para sostener fines que el poder legítimo ya no puede garantizar. Aplicado a nuestro patético presente, esto significa que la violencia deja de ser una excepción para convertirse en una regla o un recurso instrumental legitimado por narrativas que presentan a “el otro” como una amenaza digna de aniquilar. Así, el asesinato de una figura pública se vuelve parte de un continuum donde silenciar al rival- por la fuerza, por el insulto o por la cancelación- se asume cada vez más como “otra forma de hacer política”.

Por su parte, Zygmunt Bauman nos aporta una clave sociológica que complementa la lectura arendtiana. En su obra “Modernidad y Holocausto” (1989) muestra cómo las prácticas modernas pueden burocratizar la violencia y hacerla técnicamente eficiente, pero también invisibilizar su carácter estrictamente moral. Bauman escribe que la modernidad “organiza la indiferencia” y que las tecnologías sociales y administrativas transforman la violencia en algo impersonal y normalizado (Bauman, 1989). Pues bien, cuando los medios masivos de comunicación, las redes y ciertas estrategias políticas alimentan una atmósfera de miedo y enemistad, los asesinos políticos dejan de ser aberraciones incomprensibles y pasan a encajar dentro de una narrativa más amplia- la de la enemistad sistemática- que facilita su repetición.

Ahora bien, para comprender con mayor claridad este fenómeno, también es preciso comprender el vínculo existente entre la violencia, el poder y la disciplina. El abanderado de los filósofos posmo-progres, Michel Foucault- especialmente en “Vigilar y castigar” (1975)- desplaza el foco desde el agente aislado hacia las técnicas y los dispositivos que hacen que la violencia sea eficaz y cotidiana. Foucault afirma que las sociedades modernas producen “sujetos” disciplinados mediante una red de instituciones y de prácticas que normalizan la observación, la sanción y la exclusión (Foucault, 1975). Desde este punto de vista, la violencia sistematizada, entonces, no es sólo la acción de individuos violentos, sino el resultado de dispositivos que configuraron la sensibilidad social: lenguaje, procedimientos policiales, arquitectura mediática, y protocolos de deshumanización. En este entramado teórico, la muerte de Kirk puede entenderse como un instante en que esas tecnologías de exclusión alcanzan su efecto más radical.

Seguidamente, es crucial entender cómo se ha instrumentalizado la tensión mediante la propaganda y la polarización. En este sentido, Noam Chomsky, en “La fabricación del consentimiento” (1988, con Edward S. Herman), explicita cómo los medios y los intereses económicos y políticos moldean la opinión pública mediante marcos, silencios y amplificaciones selectivas, meticulosamente estudiadas, porque “la propaganda es a la democracia lo que la violencia es a una dictadura”. Esta síntesis de su crítica nos recuerda que no sólo existen actos de violencia física, sino estructuras que los preparan culturalmente. Si ciertas agendas políticas explotan el resentimiento, la indignación y la deshumanización, están creando condiciones propicias para que la violencia deje de ser una anomalía y se convierta en posible consecuencia de un tejido retórico homicida que goce de cierta legitimidad. Por lo tanto, la responsabilidad no recae únicamente en quienes empuñan el arma, sino también en quienes cultivan a diario la hostilidad desde púlpitos mediáticos y discursivos muy influyentes.

En este contexto, Walter Benjamin nos ofrece un prisma esencial y complejo para pensar la violencia política. En “Sobre el concepto de historia” (Tesis IX, 1942) y en “Crítica de la violencia” (1921), distingue entre “violencia mítica” y “violencia divina/crítica”. En “Critica de la violencia” sostiene que “la violencia que crea derecho ‘constituyente’ y la que persevera el derecho ‘constituto’ son de una especie diferente” (Benjamin, 1921). Tengamos en cuenta que para Benjamin muchas formas de violencia se naturalizan bajo la noción de que sostienen un orden jurídico- es la violencia que “preserva” lo existente-; frente a ella existe una violencia crítica, que pretende fundar un nuevo orden, aunque ésta también es problemática éticamente.

Aplicado al caso presente, el marco benjaminiano obliga a interrogarnos sobre quiénes definen qué violencia es “legítima” y cómo los discursos políticos justifican- explícita o implícitamente- ciertas prácticas violentas en nombre de la seguridad, la identidad o la “salvaguarda” del orden. Además, nuestro autor advierte sobre la idolatría del progreso y sobre cómo la historia oficial tiende a invisibilizar ciertas rupturas y catástrofes, en tanto que la naturalización de la violencia política puede ser vista como una forma de historicidad falseada que normaliza la agresión y olvida a las víctimas. Su distinción resulta útil porque no basta declarar la violencia como “necesaria” para el mantenimiento del orden, sino que hay que preguntarse por los fines, los procedimientos y quién paga el precio.

Ahora bien, para enfocar este problema desde el prisma de la vulnerabilidad, la deshumanización y la ética de la respuesta, es conveniente para algunos recurrir a la lectura posmo-progre de Judith Butler, quien en “Marcos de guerra” (2009) enfatiza que la política se funda en la forma en que las sociedades reconocen (o niegan) la vida de ciertos cuerpos. “Lo que cuenta como vida humana y lo que cuenta como figura de pérdida se organiza políticamente” (Butler, 2009), sostiene la filósofa. Desde aquí, burlarse de la muerte (mediante asesinato público) de alguien no es un gesto menor, sino un acto de deshumanización simbólica: convierte la pérdida en entretenimiento y borra la responsabilidad ética. El humor que celebra la eliminación del otro participa de la misma lógica que desactiva la empatía y facilita la repetición de la violencia en un bucle interminable.

En términos prácticos, pensar la respuesta ética exige romper con la complicidad- activa o pasiva- que legitima la deshumanización. Esto implica exigir responsabilidades mediáticas, demandar mecanismos claros de sanción ante discursos incitantes, y promover pedagogías públicas que recuperen la capacidad de indignación moral frente a la pérdida humana, cualquiera que sea la filiación del fallecido.

Estamos, desde hace tiempo, inmersos en un mundo que ha banalizado el mal, y parece no molestarle mucho. Hannah Arendt, al estudiar la banalidad del mal, nos mostró cómo el mal puede institucionalizarse y volverse corriente cuando sistémicamente se fragmenta la responsabilidad moral. Si la sociedad riñe y se burla públicamente de un asesinato cobarde, hemos dado un paso más: hemos neutralizado la capacidad colectiva de ver al otro como portador de derechos morales inalienables. Cualquier meme o declaración en redes sociales que celebra la muerte no es un acto íntimo, sino que forma parte de una práctica pública que relativiza el crimen y reduce la posibilidad de justicia restaurativa o crítica.

En conclusión, queridos lectores, de más está decir que condenamos con la máxima firmeza el asesinato de Charlie Kirk y condenamos, asimismo, con igual rotundidad, las burlas, la instrumentalización y la celebración pública de su muerte por un considerable séquito de desquiciados con acceso a internet. Todas esas manifestaciones detestables son formas de banalización de la violencia y del mal. Cuando el espectáculo sustituye al duelo y la mofa suprime la reflexión, la comunidad política demuestra que ha perdido el sentido mínimo de lo que supone la vida compartida. No hay equilibrio moral en relativizar una vida porque se disiente de sus ideas. La justicia exige investigación, sanción y, sobre todo, un examen crítico de las prácticas discursivas que hacen posible que alguien crea que un homicidio de esta índole es justificable.

Finalizo, como siempre, con algunas preguntas. ¿Qué fuerzas- mediáticas, políticas, económicas- han cultivado la atmósfera que hace posible la violencia política? ¿De qué manera nuestras propias prácticas de consumo informativo y de redes sociales contribuyen a la deshumanización del otro? ¿Cómo distinguir entre violencia “constituyente” y “violencia preservadora” sin caer en justificaciones peligrosas? ¿Qué medidas institucionales y culturales serían necesarias para restituir la capacidad colectiva de indignación moral frente a un asesinato, cualquiera sea el sujeto?

Cerrar con estas preguntas no es renunciar a las posibles respuestas, sino que es insistir en que la respuesta ética exige trabajo público, memoria crítica y reformas que desactiven la lógica de la tensión como instrumento político. Encarando estas preguntas con seriedad, algo que jamás harán los degenerados que nos gobiernan en occidente, podremos empezar a revertir la tendencia a naturalizar la violencia y proteger la dignidad humana en tiempos de polarización exacerbada.

El autores docente, escritor y filósofo
San Juan, Argentina (2025)
Testigo del Tiempo

Por J.C. Malone
Diario Azua / 21 septiembre 2025

Alberto Caminero, director de prensa de la Presidencia de la República, se reunió con periodistas dominicanos en Nueva York, el presidente Luis Abinader quedó muy mal parado. Neftalí Fuertes, jefe local del gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM), abrió el encuentro agradeciéndoles a los periodistas “su apoyo” a la gestión de gobierno del presidente Abinader. Ese apoyo, según Fuertes, ayuda a “garantizar la gobernabilidad”.

El periodista Ramón Mercedes, primero en preguntar, agradeció que Fuertes reconociera el apoyo de los periodistas, pero le reprochó que el gobierno no ha reciprocado ese apoyo. “Vamos directo al grano, ¿cómo se consiguen anuncios con este gobierno?

Muchas intervenciones de los colegas eran quejas porque no recibían anuncios del gobierno, quejas porque el gobierno no ha resuelto un problema con unas pensiones. Roberto Mota se quejó de que pese a que le demandan muchos requisitos para obtener publicidad, este gobierno le da contratos a personas que no tienen medios.

Hubo quejas de que el gobierno quiere economizar en detrimento de los seres humanos. El periodista Luis Alfredo Collado, denunció que en un evento dominicano en Times Square usaron una inteligencia artificial para hacer los anuncios, para no contratar un locutor.

Se quejaron de que cancelaron a todos los periodistas del gobierno en Nueva York, hasta desmantelaron el departamento de prensa del Consulado General de la República Dominicana. Pidieron que se designe a un periodista oficial, experimentado que sirva de canal de comunicación con el gobierno.

El cónsul Jesús-Chú Vázquez cerró agradeciendo la participación de los periodistas. Y quedó demostrado, la gente del gobierno está ocupada economizando. Ni el café ni los pastelitos alcanzaron para todos los invitados, quizá esa es la mejor explicación del descontento general expresado.

Comenté, en la calle, caminando con Quisqueya Sepúlveda y César Romero, que el gobierno estaba mal parado en la ciudad. Alguien que venía detrás escuchó, se incluyó en la conversación diciendo: “muy mal, yo voté por ellos pero más nunca”. Abinader vendrá a Nueva York, a la asamblea de la ONU, sentirá el descontento. Eso explica que haya cancelado todos sus encuentros con la comunidad dominicana del exterior.

Por Narciso Isa Conde
Diario Azua / 21 septiembre 2025.-

En nuestro país la democracia real es un mito y la independencia una ficción. Somos una sociedad dominada por una oligarquía capitalista transnacional y local, y por una partidocracia corrupta y conservadora.

Impera el dominio de EE. UU sobre toda la isla. Dos países absolutamente dependientes del imperialismo occidental y del mando político-militar estadounidense.

El poder del dinero, la plutocracia, rige todas las instituciones de nuestro país, incluido el sistema electoral, hasta convertir las votaciones en mercado, los/as electores/as en clientes, los partidos en compañías por acciones y los votos en mercancías.

El despliegue recolonizador y neoconservador (neoliberal) ha sido brutal, aplastando soberanía y derechos; privatizando lo público en gran escala, endiosando el mercado, concentrando poder y riquezas en manos de las elites mega capitalistas, potenciando los monopolios y oligopolios, e imponiendo desigualdades tan crueles como grotescas…

Esto hasta llegar a un presente en el que se ha configurado un gobierno empresarial, que bajo la gobernación de Luis Abinader, el Grupo Vicini, la Banca Privada y los Tecnócratas que fungen de agentes de las elites burguesas, intenta completar las contra-reformas neoliberales.

De ahí su empeño en privatizar gran parte de las funciones estatales, asaltar los puntos clave del Estado desde la cúpula del CONEP, apropiarse de todos los servicios públicos, de lo que queda de las empresas y propiedades estatales: sistema eléctrico puertos, aeropuertos, autovías y de todo el patrimonio natural del país: suelo, subsuelo, sobresuelo: incluidas playas, montañas y fuentes de agua .La corruptela en SENASA, protegida durante 5 años, se mezcló con la privatización de esa ARS pública,

Las vías son las APPS, los Fideicomisos público-privados, y el endeudamiento externo amarrado a las privatizaciones.

A esto se le suma un renovado impulso al colonialismo moderno en todos los campos: cultural, ideológico, mediático, económico, militar…paradójicamente mezclado e infectado de todo lo conservador, incluido lo fascistoide…Del retroceso a un Estado más religioso, anti-laico, patriarcal, caudillista, racistas, xenófobo, homofóbico y adulto-céntrico.

La democracia es falsa e irreal y la independencia solo una meta a rescatar. Usan el tema perversamente solo para hacer política racista antihaitiana, extorsionar a los inmigrantes y personas negras y para violar cruelmente los derechos de la emigración del país vecino y de sus descebndientes. ¡Neofascismo abundante!”

Y cuando nos aproximamos el tema de corrupción e impunidad, o a la proclamada transparencia gubernamental, chocamos de frente con las vacas sagradas del gran empresariado y sus estafas concretadas en el oneroso contrato de San Souci, en la apropiación dolosa de Antena Latina y en los casos de Ege-Haina y Ege-Itabo en FONPER.

· Con Leonel, Danilo y sus comparsas de alto nivel, todavía impunes. Ni hablar del balaguerismo criminal.

· Con ex jefes policiales asesinos y ladrones, y los narco-generales, burlándose de la sociedad.

· Con graves delitos ambientales, pasados y presentes, totalmente impunes.

· Con las APPS y los Fideicomisos como instrumentos para privatizar y traficar influencia.

¿Por qué evadir, e incluso bloquear casos tan graves como los de Antena Latina, San Souci, Eges-Haina, Ege-itabo, Cogentrix, Coastal-mafia gas propano, Diandino, Punta Catalina, Súper-Tucanos, PRM/ López.Pilarte /Miguel Gutiérrez, contrato-estafa Barrick Gold, delitos ambientales de grandes empresarios, mafia congresual?

¿Por qué no se sanciona la violencia de género y a los fiscales cómplices a todos los niveles? Igual los tantos casos de violencia y criminalidad racista anti haitiana.

¿Por qué evadir las investigaciones sobre los vínculos presidenciales y de altos dirigentes políticos, policiales, militares y empresariales en narco-casos tan relevantes como los de Arturo Del Tiempo Márquez, Nelson Solano, Quirino, Toño Leña, Figueroa Agosto, Cesar El Abusador, ¿familia López Pilarte?

¿Por qué? …Si abundan las denuncias y las evidencias, si sobran los barriles y barrilitos, los partidos y partiditos embarrados de lodo y pus.

Observen que por iniciativa de este gobierno se han aportado pocas informaciones para estructurar querellas por corrupción y crímenes de Estado, a pesar de las cuantiosas informaciones disponibles.

Abundan las vacas sagradas del pasado y del presente
Gisela León, Dios Yngrid Minaya, Nelson Hahn, Marylola Lantigua, Grenlly Estevez, Noel Luna, Leidi Diaz y Juan Rosa.

El Business Summit Contadores 2026 posicionará a la Ciudad Corazón como referente en contabilidad, reuniendo a expertos de toda Latinoamérica y el Caribe

Por Yenifer Martínez / Diario Azua
Santiago de los Caballeros, Rep. Dom. / 21 septiembre 2025.-

El Instituto de Contadores Públicos Autorizados de la República Dominicana (ICPARD), filial Santiago, anunció la realización del Business Summit Contadores 2026, primer congreso internacional que reunirá a expertos y profesionales de toda Latinoamérica y el Caribe.
Grenlly Estévez, Marylola Lantigua y Leidy Disla.

El evento se realizará del 19 al 22 de febrero de 2026 y convertirá a Santiago en el epicentro de la contabilidad regional, acogiendo conferencias magistrales, paneles de discusión y actividades de formación práctica en torno a los principales retos de la profesión.

Durante el cóctel de presentación, Lic. Dios Yngrid Minaya, presidenta del ICPARD filial Santiago, presentó los detalles del congreso, del cual participarán representantes de varios países, como México, Colombia, Argentina, Paraguay, Chile, Perú, entre otros, junto a delegaciones de toda Centroamérica y el Caribe.
Eddy Gil, Daisy Pérez, Cecilia Martínez y Willian Jiménez.

“Con este congreso damos un paso firme hacia la actualización y el fortalecimiento de la profesión contable, integrando la innovación tecnológica y las nuevas normativas internacionales”, destacó Minaya, quien agregó que Santiago se convertirá en la plataforma donde la contabilidad latinoamericana se conecte, aprenda y proyecte su futuro.
En el acto, Lic. Pedro Arnó, presidente nacional del ICPARD, resaltó la importancia de que el país acoja un encuentro de este nivel, subrayando que se trata de un hito para la República Dominicana y una oportunidad de mostrar al mundo el liderazgo profesional y académico de la comunidad contable local.

El Business Summit Contadores 2026 tiene el aval de la Asociación Interamericana de Contabilidad y el International Federation of Accountans y estará dirigido a contadores públicos, auditores, gerentes, empresarios, administradores, economistas, abogados, mercadólogos, emprendedores y estudiantes. 
Dios Yngrid Minaya expresó que el congreso impulsará la profesión contable.

El objetivo de la jornada es actualizar y fortalecer sus conocimientos a través de un programa que fomente el aprendizaje práctico, el intercambio de experiencias y la discusión de los principales desafíos de la profesión en la región. 

La iniciativa tiene el visto bueno del Lic. Nelson Hanh, vicepresidente de la Asociación Internacional de Contabilidad.
Elbin Mendoza, Juan Estévez y Luis Marte Brito.

A lo largo de toda la jornada se abordarán temas como la inteligencia artificial aplicada a la contabilidad, los informes de sostenibilidad bajo estándares NIIF S1 y NIIF S2, la auditoría forense, la ética y la responsabilidad profesional, la gestión de calidad y los retos económicos de la región. 
Rosa Santos y Dios Yngrid Minaya.

Además, servirá como un espacio de networking para fomentar la colaboración entre profesionales y fortalecer el gremio en toda la región.

El anuncio de este evento de alto nivel marca el inicio de una serie de actividades que tendrán como punto culminante el congreso en febrero de 2026. 
Massiel Hahn y Lisa Candelario.
Con esta iniciativa, el ICPARD filial Santiago consolida a la ciudad como “Capital de los Contadores” y reafirma su compromiso con la excelencia profesional y la integración regional.

Johnny Pujols, secretario general del PLD, junto a una representación del CP del PLD encabezan jornada en el Día Nacional de Limpieza.

Diario Azua
Santo Domingo, Rep. Dom. / 21 septiembre 2025.-

El Secretario General del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Johnny Pujols, conjuntamente con una representación del Comité Político, miembros del Comité Central en el Distrito Nacional y regidores participaron de la jornada del Día Nacional de la Limpieza, organizado por la Secretaría de Asuntos Municipales peledeísta.

Junto al Secretario General del PLD participaron la vicepresidenta del PLD, Zoraima Cuello; el miembro del Comité Político, Melanio Paredes; la titular de Asuntos Municipales, Francis Jorge; los regidores del Distrito Nacional, Jorge Feliz Pacheco, Domingo Corniel y Franklin Ferreras, entre otros dirigentes nacionales.

Además de la limpieza en distintos puntos del país, el PLD respaldó la campaña “Tapitas por Quimio”, una noble causa que busca ayudar a niños y niñas con cáncer.
Esta iniciativa es promovida por la Secretaría de Asuntos Municipales, en cumplimiento del decreto emitido en junio de 2017 por el expresidente Danilo Medina.

Alcaldes, directores de distritos municipales, regidores, vocales y dirigentes peledeístas en todo el territorio nacional, se sumaron a las brigadas de limpieza en el marco del Día Mundial de la Limpieza, que este año se celebró el 20 de septiembre.

Durante el operativo, los militantes y voluntarios del PLD exhibieron con orgullo los colores morado y amarillo en gorras y camisetas, mientras se protegían de la lluvia, el sol y el calor.

Asimismo, camionetas de miembros y allegados al partido sirvieron como medio de transporte para trasladar a los vertederos de las distintas comunidades las fundas con los desperdicios recolectados.

 

“Necesitamos generar una capacidad institucional sólida en todo lo que tiene que ver con ingresos, documentación, contratos, con permisos de entrada”

El presidente del Instituto de Migración plantea permisos claros y cumplibles en el tiempo

Diario Azua
Santo Domingo, Rep. Dom. / 21 septiembre 2025.-

El director ejecutivo del Instituto Nacional de Migración, doctor Wilfredo Lozano, afirmó que existe la necesidad de reformar la Ley General de Migración, los protocolos que regulan las deportaciones de inmigrantes indocumentados y los contratos de trabajo.

Entrevistado por el periodista Federico Méndez, en el programa Esferas de Poder, que se transmite los domingos de 8:00 a 9:00 de la mañana, por RNN Canal 27, plantea también la modificación de los instrumentos normativos que rigen los aspectos migratorios del país.

Lozano dijo que en las conclusiones de los acuerdos firmados producto de las reuniones celebradas en el Consejo Económico y Social (CES) quedó claro que el marco normativo requiere reformas.

“Pero no solo la Ley de Migración, hay protocolos que regulan las deportaciones, hay protocolos que regulan los contratos, etc. Hay que reformar también muchos aspectos del entramado normativo”, recalcó.

Establece que hay que buscar la forma de proceder a un ordenamiento efectivo de la movilidad del trabajo, porque se requiere generar una capacidad institucional sólida en todo lo que tiene que ver con ingresos, documentación, contratos y permisos de entrada de haitianos.

Lozano calificó como una alharaca atribuirle al Consejo Económico y Social (CES) el planteamiento de que se está impulsando un plan de regularización de haitianos en ese sentido, cosa que en ningún momento se ha propuesto.

“Lo que sí se ha planteado es que independientemente del derecho y de la efectividad de la política de repatriaciones, hay que resolver el tema de que hay sectores de la economía que dependen claramente de la inmigración, y esto hay que ponerle orden, no puede esto seguir de esa forma que se ha venido desempeñando el mercado de trabajo”, argumentó.

Sostiene que en sectores estratégicos como la agropecuaria y la construcción, nadie discute la presencia masiva de trabajadores haitianos y la política que se tenga en materia de repatriación, pero asegura que hay que resolver el tema de la documentación y el establecimiento de permisos claros y cumplibles en el tiempo.

“Hay que formalizar en la medida en que estos empleos así lo demandan los contratos de trabajo, y lo digo porque en esos sectores estratégicos no se trata del trabajo de un obrero fabril clásico, en la agricultura los trabajos son muy volátiles, de corto tiempo, etc. Hay que buscar el mecanismo para ordenar eso, no puede ser un desorden, un caos allí”, adujo.
La visa de trabajo

El director del Instituto Nacional de Migración establece que en la Ley de Migración no se contempla la visa de trabajo para inmigrantes haitianos o los permisos de trabajo para el trabajador manual no calificado.

Considera el tema como un punto fundamental, a pesar de lo cual en la norma actual no se estipula el concepto de visa de trabajo para esa clase de trabajador.

“El trabajador manual, estoy hablando del trabajador manual no calificado, el trabajador profesional calificado sí está contemplado en la ley, pero el trabajador jornalero, peón, que viene a trabajar en la agricultura, etc. No hay un instrumento en la ley actual vigente que se asemeje a la idea de visa de trabajo. Eso hay que resolverlo porque esa es una retranca que limita la institucionalización de la movilidad de ese tipo de trabajadores”, aclaró.

Cree que esto va a implicar establecer un régimen regulatorio, un ordenador para este tipo de inmigrante laboral que por lo general es de temporada.

Pide rigurosidad en persecución y sanción a traficantes de ilegales

Considera como un precedente muy positivo para el país que todos los sectores se pongan de acuerdo en los puntos planteados en el Consejo Económico y Social (CES).

Afirma que es necesaria una mayor rigurosidad y capacidad de persecución y sanción a quienes trafican con migrantes, que constituye uno de los asuntos más importantes.

Estima que en la medida en que el país genere capacidad para perseguir a quienes trafican con personas, se introduce orden y control en el movimiento de personas en la isla.

Lozano destacó además la necesidad de respetar el marco normativo que regulan las leyes, independientemente de que también allí se quedó claro que ese proceso requiere a su vez reformas.

Asimismo, observa que se requiere generar estadística regular, normal y permanente para tener la información dura que permita establecer políticas en base a los hechos.

“Ese diálogo, más allá de las conclusiones, muestra una voluntad de concertación, muestra una capacidad de acuerdo, de entendimiento entre muchas opiniones diferentes”, significó.

Lozano expresa que de alguna u otra manera, el documento que se conoce hoy expresa sobre todo los puntos donde todos están de acuerdo.

Asegura que las diferencias políticas no fueron óbices para acuerdos en el CES

El sociólogo y académico plantea que también deja entrever que las diferencias que se tenían no fueron óbices para impedir llegar a un cierto entendimiento, para llevarle a los ex presidentes puntos en los que todas esas voluntades le dijeron que los temas “son asuntos en los que todos estamos de acuerdo”.

“Ahí había de todo. Ahí estaban las opiniones de los partidos de oposición más importantes, del PRM, del gobierno central, de los empresarios, de los sindicatos, de la sociedad civil. Y allí se sentaron y discutieron”, argumenta.

El académico dijo que en el CES se vio la necesidad, aunque este fue un tema que lamentablemente no se trató con lo que a su juicio demandaba mayor profundidad, la importancia de que los órganos que regulan y controlan la migración, no solamente sean modernizados, sino también que el conjunto de organismos del Estado en torno a los cuales se construye la gestión migratoria tienen que tener mayor capacidad de coordinación entre sí.

“Dígase Consejo Nacional de Migración, esto tiene que ser más efectivo, o más bien, tiene que realmente ser efectivo”, enfatiza.

Manifestó se vio la urgencia también de un mayor involucramiento del Ministerio de Trabajo en lo que tiene que ver con la gestión migratoria, porque está claro que el grueso de la inmigración tiene que ver con la cuestión del trabajo.

Se refiere específicamente al tema de la inmigración que está compuesta sobre todo por jornaleros que vienen a trabajar en actividades muy claras, agropecuaria, construcción, etcétera.

jueves, 18 de septiembre de 2025



Por Néstor Estévez
Diario Azua / 18 septiembre 2025.-

Recientemente he publicado sobre reputación, sobre esa huella o sello que dejamos en los demás y que termina condicionando nuestras relaciones. Así vimos cómo los hábitos cotidianos terminan creando un “sello” personal: una especie de marca que otros perciben de nosotros.

Explicamos sobre gente que termina ganándose motes como “el negativo”. También vimos que el asunto no se queda ahí, sino que así recuerdan los demás a esa gente y que como tal la tratan.

Por fortuna, también vimos que quienes por sus hábitos y acciones dejan huellas positivas logran fama de ser personas confiables, solidarias o cualquier otra etiqueta que se correspondan con sus actuaciones habituales. Referimos que las huellas, positivas o negativas, se forman e inciden en la familia, en la comunidad o en el trabajo y en otros muy diversos ámbitos de la sociedad.

Pero siendo las redes sociales esa especie de “arena pública”, como la llaman algunos especialistas, y que han llegado a lograr omnipresencia en nuestras vidas, es muy válido preguntarse: ¿qué ocurre con nuestras huellas en redes sociales?

Sencillamente, lo que publicamos nos define. Y así ocurre porque cada publicación en redes sociales es un espejo que amplifica nuestra marca personal. En redes como Facebook, Instagram o X (antes Twitter), lo que compartimos deja huellas más fuertes que en la conversación cara a cara.

Si alguien publica constantemente noticias tristes, quejas o burlas, pronto será visto como “el pesimista” o “el amargado digital”. Aunque en su vida real sea diferente, la percepción en el mundo virtual termina pesando. Así es como una simple mirada sirve para identificar a quien protesta por todo, a quien vive de denostar, en fin, a cada quien según lo que publica.

Por el contrario, quien comparte contenido útil, reflexiones equilibradas o momentos positivos de la vida cotidiana suele ser recordado como alguien que inspira confianza o genera buen ánimo. Es lo que algunos especialistas llaman marca o huella digital: la versión pública de nuestro sello personal en internet.

En uno y en otro caso, aunque publiquen pensando en que se están dirigiendo a su “blanco de público” y hasta con el convencimiento de que “se la están comiendo”, lo real es que, dependiendo de quien vea sus mensajes, están diciendo mucho sobre su propia persona.

A cada quien lo suyo

Quien siempre comparte quejas políticas, aunque tenga razón en algunos planteamientos, con el tiempo la gente lo identifica como “el que todo lo critica” y termina perdiendo. Mientras, quien llena sus redes de frases motivadoras y gestos solidarios también “cosecha lo suyo”: se convierte en referente de esperanza para sus contactos, aunque tenga sus propios problemas.

La diferencia principal con las redes es que lo que publicamos queda registrado. Una conversación cara a cara se olvida con el tiempo; un post o un tuit puede ser recordado años después. Eso hace que el sello digital sea aún más fuerte. Incluso, aunque borremos, alguien pudo haberlo guardado, y lo puede volver a publicar.

Por eso, antes de publicar, conviene preguntarse: ¿esto aporta algo? ¿A quién? ¿Quiero que me recuerden por este tipo de mensajes? ¿Me suma o me resta como persona?

Claves fundamentales

Algunas claves sencillas y muy prácticas pueden ayudarnos a bien gestionar nuestra reputación digital:

1.- Ser selectivos. No todo lo que pensamos o nos llega merece ser publicado. Elegir bien lo que compartimos es cuidar nuestro sello.

2.- Equilibrar. Está bien denunciar problemas, pero conviene acompañarlos con propuestas, datos o ejemplos positivos.

3.- Mostrar humanidad. No se trata de parecer perfectos, sino de reflejar un balance: logros, aprendizajes, errores y también gratitud.

4.- Pensar en el futuro. Lo que publicamos hoy puede influir en oportunidades laborales, relaciones o proyectos mañana.

5.- Revisar el historial. De vez en cuando conviene mirar lo que hemos compartido, y borrar lo que ya no refleja quiénes somos.

Recuerda: tanto en la vida diaria como en las redes sociales, nuestro sello se construye con lo que repetimos. Lo que decimos y hacemos, incluso sin proponérnoslo, se convierte en la huella por la que otros nos recuerdan. Así se construye nuestra reputación digital.

Concluyo preguntando: ¿qué quieres que la gente piense cuando vea tu nombre en una publicación digital?




Testigo del tiempo


Por J.C. Malone
Diario Azua / 18 septiembre 2025.-

En los antiguos “cuartos oscuros”, donde “revelaban negativos” fotográficos, la oscuridad eliminaba las distracciones, nos enfocábamos en cómo emergía la imagen del papel sumergido en el reactivo.

Si nos guiamos de esa experiencia, desconectamos el ruido, el histrionismo del presidente Donald Trump, no escuchando sus palabras, concentrados en sus acciones, emergerá su coherencia rigurosa.

Todo lo que él dice es ruido, distracción, pongamos el volumen en cero, que sería como apagar las luces del “cuarto oscuro”, concentremosnos en lo que hace. Sólo así podremos entender que en realidad el presidente, de manera rigurosamente disciplinada, sigue el guión, el libreto.

Trump lleva nueve meses gobernando, cualquier mujer embarazada el 20 de enero de este año, cuando él se juramentó, estaría pariendo en estos días, o ya parió. Trump, sin embargo, no ha cumplido sus promesas básicas de terminar las guerras, al contrario, profundiza el armamentismo.

Expande las políticas que le criticó a Joe Biden.

La guerra de Ucrania se detiene el día que la Casa Blanca suspenda la expansión de la OTAN, también el envío de armas y dinero a Ucrania. Trump habla, habla, pero financia la guerra y quiere profundizar las sanciones contra Rusia, sigue el mismo guión.

Biden inició el cerco contra Nicolás Maduro en Venezuela, ahí surgieron las “multinacionales petroleras dominicanas” invirtiendo dinero en la region Esequiba de Guyana, en disputa con Caracas. Cuando dije que eso podría llevar a un enfrentamiento militar entre dominicanos y venezolanos, dijeron que estaba “loco”.

Siguiendo el mismo guión, siendo más directo para lograr el mismo viejo objetivo, Trump militariza las costas venezolanas. Quizá arme una “coalición de voluntarios” para invadir, donde “posiblemente” participen tropas dominicanas, para “defender nuestras inversiones petroleras”.

Discutimos ¿cuál es mejor, Trump o Biden? Tienen diferencias.

Biden le pone salsa de BBQ, con el sabor dulzón del jugo de naranjas, Trump le pone muchos jalapeños, es picantísimo, pero es el mismo hamburger chatarra.

Desconectando el volumen, llegamos al cine mudo de Charlie Chaplin; siguiendo el guión disciplinadamente, Trump es rigurosamente coherente.

Sigueme en Youtube...

Por Carmen Estevez / Diario Azua
La Altagracia, Rep.Dom. / 18 septiembre 2025.-

El alcalde de La Otra Banda, Alexander Rodríguez “El Hijo del Pueblo”, inspeccionó los trabajos del Boulevard Turístico, una vía de 2.5 km que conectará en solo 12 minutos la comunidad de Vallejina con la Autopista del Coral y el Aeropuerto de Punta Cana. Actualmente, este trayecto toma hasta 45 minutos por los congestionamientos en Verón.

 Seguridad y desarrollo económico

Rodríguez destacó que la provincia La Altagracia ocupa el primer lugar en accidentes de tránsito, por lo que esta vía contribuirá a salvar vidas, agilizar la movilidad y dinamizar la economía local.

 Sentencia histórica a favor de los distritos municipales

El alcalde también celebró la sentencia del Tribunal Superior Administrativo (TSA) que ordena al Ministerio de Vivienda reconocer el derecho de distritos como La Otra Banda y Verón a emitir autorizaciones de uso de suelo, tal como lo establece la Ley 368-22. Esta decisión destraba proyectos millonarios de inversión turística y hotelera que habían estado paralizados.

 Denuncia trabas políticas

Rodríguez denunció intentos de sectores tradicionales de frenar el proyecto vial mediante influencias en instituciones como Medio Ambiente y SEMPA, aunque aclaró que la obra solo roza en 200 metros un área de amortiguamiento y cumple con los requisitos técnicos exigidos.

 Un alcalde de cambio

“Llegamos para transformar. No permitiremos que intereses personales frenen el desarrollo de nuestra gente.

La Otra Banda avanza hacia un futuro de progreso, seguridad y oportunidades”, concluyó Rodríguez.

 

Por Ramón Mercedes / Diario Azua
Nueva York / 18 septiembre 2025.-

A ritmo de merengue, bachata, cumbia, ranchera y vallenato miles de latinos, incluido cientos de dominicanos, ocuparon este martes la zona de Times Square en el mayor evento artístico cultural público en la Gran Manzana, para dar inicio a la celebración del Mes de la Herencia Hispana.

Desde la 1:00 de la tarde, representaciones artísticas de Ecuador, Colombia, Puerto Rico, México y República Dominicana llenaron de alegría la icónica plaza turística del centro de Manhattan con su música, cultura y folklore, en un evento denominado «Latinos en Times Square», que contó con el apoyo del Departamento de Transporte de NYC (DOT-NY), y su comisionado Ydanis Rodríguez, bajo la coordinación del popular productor de espectáculos, el empresario mexicano Pedro Zamora.

El clima neoyorquino brindaba su mayor esplendor cuando a la 1:00 de la tarde el folklore ecuatoriano irrumpió la tarima ubicada en el Father Duffy Square, en Broadway con las calles 46 y 47, con el espectáculo Ecuador Ilumina Times Square, en el que cerca de 50 personas en mostraron en escena parte de su historia, sus costumbres, sus batallas y su música.

El carnaval de Barranquilla y su reina brillaron en la plaza, reafirmando el gran aporte de los hispanos a la Gran Manzana.

Las canciones del prolífero compositor puertorriqueño Rafael Hernández cantadas por entusiastas compatriotas del teatro boricua estremecieron esa zona de Broadway para la luego dar paso al espectáculo Quisqueya la Bella, bajo la producción Alberto Zayas.

Apoyados por los ministerios de Turismo y de Relaciones Exteriores de la RD, a través del Instituto del Dominicano en el Exterior (INDEX), que dirige Celinés Toribio, los quisqueyanos hicieron alarde de su dominicanidad en la urbe con un espectáculo en el que con escenas teatrales mostraron su gran calidad en el béisbol, el arte culinario y la música, a ritmo de bachata, merengue y Dembow.

Milly Quezada, Joe Veras, Manny Cruz, Vaqueró y Zeo Muñoz, entre otros, pusieron a vibrar a las más de 3 mil almas que por espacio de 9 horas disfrutaron con alegría el evento.

“Los dominicanos, y latinos en general, somos una fuerza en esta ciudad, venimos a trabajar duro. Anteriormente los latinos no éramos contados, hoy, con la presencia de ustedes, la población de NYC es 32% blanca, 28% latina, 24% afroamericana y 15% asiática”, dijo el comisionado Rodríguez tras resaltar el espacio que el alcalde Eric Adams le ha abierto a los latinos, incluido muchos dominicanos, en el tren municipal.

“Yo no soy mexicano, pero para mí es un orgullo saber que México le ha abierto la puerta a la idea democrática para toda América Latina, pero también México ha dado un gran ejemplo, tener una mujer presidenta, mientras otros se quedan atrás”, expresó Rodríguez durante la pausa musical que dio paso a las palabras de los cónsules de Ecuador, RD y México, cuya representación, por ser el país anfitrión, tuvo a su cargo el cierre del evento.

Así, a ritmo de rancheras y mariachis expusieron su baile, la importancia del ferrocarril y varias muestra de su cultura y folklore con «México en el Corazón» y su icónico grito de «Viva México», dejando plasmado en Times Square que los latinos somos el motor de la Metrópoli.

 

Por Ramón Mercedes / Diario Azua

Nueva York / 18 septiembre 2025.-

El director de prensa de la Presidencia de la República Dominicana, Alberto Caminero, sostuvo un encuentro la mañana de miércoles con más de 50 periodistas y comunicadores dominicanos que ejercen para diferentes medios y residen en esta ciudad.

Caminero, un periodista de larga data, reconoció y llamó por sus nombres al 90% de los asistentes, y destacó la importancia de mantener una relación cercana, transparente con los comunicadores, «porque el objetivo es de fortalecer los vínculos y acercar la política comunicacional del gobierno dominicano con la diáspora”.

«Soy un periodista que ha vivido de lo que ustedes viven. He estado en redacciones, he sido productor y coproductor de programas. Sé lo que necesita un medio de comunicación, por eso quiero que me vean como un representante de ustedes en el gobierno del presidente Luis Abinader», precisó.

Uno de los temas centrales abordados fue el apoyo a las pensiones de los periodistas. Caminero afirmó que se trata de una lucha que siempre ha defendido como gremialista, porque «no es justo que un periodista sea pensionado cuando ya no pueda caminar o su salud está deteriorada. Las pensiones deben garantizar dignidad después de décadas de servicio”, sostuvo.

«El presidente Abinader retomó esta política y yo me comprometo a revisar los casos, tanto en RD, NY, Boston, Miami y otros lugares, donde hay colegas que han entregado su vida al oficio y merecen ese reconocimiento», indicó.

El funcionario también habló sobre la distribución de la publicidad oficial, garantizando que será transparente y equitativa: «Todo aquel que tenga un programa o un medio, sea digital, de radio o de televisión, cumpliendo con los requisitos de ley, tendrá nuestro respaldo», subrayó.

«Pero quien no tenga un medio real no podrá recibir publicidad. La distribución será equilibrada, objetiva y transparente, porque el presidente Abinader ha demostrado un firme compromiso con la lucha anticorrupción y con el apoyo democrático a los medios de comunicación», expresó.

Caminero valoró la intervención de los periodistas, añadiendo «ustedes convierten en noticias cosas que ocurren aquí y repercuten allá. No han perdido la conexión con el país y yo voy a valorar bastante eso» proclamó.

El cónsul dominicano Jesús -Chu- Vásquez también valoró de positivo el encuentro, resaltando el esfuerzo de Caminero por acercar al gobierno con los comunicadores de la diáspora y reconociendo la importancia de mantener informada y orientada a la comunidad dominicana en el exterior.

Los periodistas y comunicadores presentes coincidieron en destacar el encuentro como un ejercicio positivo, necesario y transparente, en el que se expusieron inquietudes y propuestas, valorando que se les abran espacios de diálogo directo con el gobierno dominicano y que se reconozca la importancia de su rol en la orientación y fortalecimiento de la comunidad en el exterior.

La reunión se llevó a cabo en el local de Cultura, ubicado en la avenida Amsterdam con la calle 180, en el Alto Manhattan.

Por Ramón Mercedes / Diario Azua
Nueva York / 18 septiembre 2025.-

Las mujeres en Estados Unidos viven más que los hombres, según una reciente investigación de la clínica de salud hormonal Feel30, basada en los últimos datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), una agencia federal norteamericana bajo la dirección del Departamento de Salud y Servicios Humanos.

En territorio estadounidense residen, hasta el pasado 16 de septiembre, la cantidad de 347 millones 659.963 personas, el 4,22% de la población mundial, según estadisticas de Worldometer con los datos más recientes de las Naciones Unidas.

En EE. UU. residen 2,398,009 dominicanos, entre ellos 1,266,149 mujeres (52.8%) y 1,131,860 hombres (47.2%), según el último censo del Instituto de Dominicanos(as) en el Exterior (Index).

La esperanza de vida varía significativamente entre estados, con una brecha de casi 9 años entre el lugar con mayor longevidad y el que presenta las cifras más bajas.

Las estimaciones para 2025 sitúan la población femenina en USA en 172.965.114 (49,75%) y la masculina en 174.684.809 (50,25%), según datos de populationtoday.com.

Los estados de NY y NJ, con más de un millón 100 mil quisqueyanos, ocupan el cuarto lugar, con un promedio de 79 años. La cantidad de 81.6 años para mujeres y 76.3 para los hombres.

lunes, 15 de septiembre de 2025

Por Lisandro Prieto Femenía
Diario Azua / 15 septiembre 2025.-

“La más noble función de un escritor es dar testimonio, como acta notarial y como fiel cronista, del tiempo que le ha tocado vivir”. Arturo Pérez-Reverte

El reporte de la muerte de Anas al-Sharif y otros periodistas de la cadena Al Jazeera en un bombardeo israelí en Gaza en agosto de 2025 no es un suceso noticioso amarillo, sino un evento que actúa como catalizador de una profunda reflexión filosófica. El ataque, que tuvo como objetivo una carpa de prensa ubicada cerca del hospital de al-Shifa, fue inmediatamente condenado por organismos internacionales como la ONU y el gobierno de España, entre otros. Estas condenas calificaron el acto como una “grave violación del derecho internacional humanitario”. La rápida reacción de estos actores globales subraya la seriedad con la que se perciben los ataques a la prensa en las zonas de conflicto, reconociendo el papel esencial del periodismo para el derecho a la información y la libertad de expresión, incluso en las circunstancias más peligrosas.

Sin embargo, el relato de los hechos se complica con la contra-narrativa proporcionada por Israel. En lugar de negar la autoría del ataque, Israel lo “confirmó” pero, al mismo tiempo, afirmó que el periodista precitado era un “terrorista que se hacía pasar por periodista”. Esta declaración crea una dicotomía que trasciende el desacuerdo factual, abriendo un abismo de preguntas filosóficas. La inaccesibilidad de algunas fuentes periodísticas clave es, en sí misma, un síntoma de la opacidad y la dificultad de verificar la verdad en estos conflictos, donde la información se convierte en un frente más de batalla. La pregunta que nos hacemos aquí es fundamental: ¿cómo se puede justificar moralmente un acto de violencia letal cuando las narrativas sobre la identidad y el estatus de la víctima son irreconciliables?

La dicotomía de narrativas sobre el ataque no constituye un simple desacuerdo sobre los hechos, sino que se trata de una deliberada estrategia de guerra. La violencia dirigida a los periodistas y la subsiguiente justificación que los tacha de terroristas no es un acto aislado, sino un método coordinado para controlar la narrativa y deslegitimar a cualquier testigo posible. No sólo se busca la eliminación física del reportero, sino también la desacreditación de cualquier evidencia que pudiera haber recopilado. Al confirmar el ataque pero descalificar moralmente a la víctima, Israel busca anular la protección que el derecho internacional humanitario otorga a los periodistas. La implicación de esta acción es profunda porque si la condición de “periodista” puede ser borrada por la declaración de un bando beligerante, el valor de su testimonio se desvanece. La guerra moderna se libra no sólo con armamento, sino con la capacidad de redefinir la realidad misma, apuntando directamente a la figura del testigo ocular. Así, el asesinato de periodistas se convierte en un ataque a la objetividad y a la posibilidad de que no existe una verdad compartida fuera del control de los actores que lideran el conflicto.

Para comprender la compleja red de dilemas morales y legales que envuelven la muerte de periodistas en un contexto bélico, es indispensable recurrir a la “Teoría de la guerra justa”, un marco filosófico que ha guiado la reflexión sobre los conflictos armados desde la antigüedad. Esta teoría se divide en dos partes principales: el Ius ad bellum, que borda la moralidad de ir a la guerra, y el Ius in bello, que se centra en la moralidad de la conducta una vez que la guerra ha comenzado. En el caso específico del ataque a la prensa en Gaza, la atención se dirige al ius in bello, que exige que todos los combatientes, sin importar la justicia de su causa, respeten ciertas reglas básicas de conducta.

Uno de los pilares más importantes del ius in bello es el “principio de discriminación”, el cual dicta que los ataques deben dirigirse exclusivamente contra combatientes legítimos, protegiendo a la población civil y a aquellos que no participan directamente en las hostilidades. Filosóficamente, la justificación moral para matar en una guerra se basa en que los objetivos legítimos han perdido su “derecho” a “no ser atacados militarmente”, es decir, que son “moralmente susceptibles” de un ataque letal. Por el contrario, el simple hecho de que una persona sea un no-combatiente es suficiente para que no pueda ser moralmente atacada. Pues bien, los periodistas, en su calidad de civiles, están explícitamente protegidos bajo este marco, siempre que no participen en las hostilidades. El ataque que mató a seis periodistas de Al Jazeera en una carpa de guerra, un objetivo no militar, ilustra la aplicación directa de este principio.

Como dijimos recientemente, la justificación israelí de que Anas al-Sharif era un “terrorista”, es un intento de anular su estatus de no combatiente y, por lo tanto, fundamentar su “susceptibilidad moral” a ser atacado. Al re-etiquetar a un civil como combatiente, una de las partes beligerantes intenta legitimar su acto de violencia a posteriori. Esta acción revela una profunda vulnerabilidad del derecho internacional humanitario: su dependencia de una interpretación compartida de la realidad y del estatus de las víctimas. Si la definición de “no combatiente” puede ser anulada por una declaración unilateral de un bando, el principio de discriminación deja de ser un derecho universal para convertirse en un privilegio discrecional, vaciando de su significado a toda la estructura del derecho humanitario.

Este perverso proceso de re-etiquetación expone la fricción inherente entre la teoría de la guerra justa y su aplicación práctica. La vida en el campo de batalla, dominada por el caos y el instinto de supervivencia, a menudo empuja a los soldados a desconectar su sistema de creencia moral en favor de la victoria. El ejército confía en el juicio moral de sus líderes en el campo de batalla, un juicio que puede llevar a dejar de lado bastantes asuntos morales fundamentales.

Además del principio de discriminación, el ius in bello también se rige por el “principio de proporcionalidad”, que prohíbe los ataques cuyos daños colaterales a civiles sean excesivos en relación con la ventaja militar directa y concreta esperada. En este caso, la justificación militar del ataque a una carpa de prensa, que resultó en la muerte de múltiples civiles protegidos, es cuestionable. El acto no sólo parece gallar en la discriminación, sino que también parece inherentemente desproporcionado. Surge, entonces, la pregunta filosófica: ¿qué valor tiene un objetivo militar (si es que existía alguno) frente a la aniquilación de la verdad en el campo de batalla?

Al respecto, es interesante acudir a la opinión del escritor y ex corresponsal de guerra Arturo Pérez-Reverte, quien expresó su postura sobre el conflicto en Gaza, añadiendo asimismo una capa de complejidad a esta delicada discusión. Pérez-Reverte, que anteriormente se consideraba “proisraelí”, afirmó que la respuesta de Israel al ataque de Hamás había llegado a “extremos tan bárbaros” que ya no podría considerarse un simple “daño colateral”. En su opinión, lo que está sucediendo es un “asesinato” y, por lo tanto, Israel es un “Estado que está asesinando a una población”. Esta fuerte condena moral, proveniente de alguien con experiencia en conflictos y una postura previa de apoyo a la aspiración democrática de Israel, nos muestra cómo el concepto de lo que es un ataque “justificable” en la guerra puede mutar a los ojos de los observadores a medida que la brutalidad del conflicto alcanza nuevos niveles.

Es momento, entonces, de hablar de la ética de la información en el campo de batalla. El periodismo en zonas de guerra, lejos de ser un mero oficio, es una vocación que se adhiere a un conjunto de principios éticos rigurosos. La ética periodística en la guerra exige que los reporteros busquen la verdad, mantengan la neutralidad y la objetividad, y eviten causar daño alguno. El derecho internacional reconoce esta labor y otorga a los reporteros el estatus de civiles protegidos, siempre que no tomen parte activa en las hostilidades. Los Estados tienen la obligación explícita de garantizar la seguridad de estos profesionales, ya que su asesinato no sólo vulnera su derecho a la vida, sino que constituye una gravísima violación del derecho a la libertad de expresión internacional. Esta violación afecta tanto al derecho individual del periodista como al derecho colectivo de la sociedad a recibir información veraz en tiempos de guerra.

A pesar de esta protección legal, los periodistas se ven obligados a operar en un ambiente de riesgo extremo. Los protocolos de seguridad para corresponsales de guerra son extensos y detallados, abarcando desde el uso de chalecos antibalas y cascos hasta la encriptación de las comunicaciones y la correspondiente preparación física y psicológica. Esta paradoja entre la protección nominal y el riesgo palpable crea una tensión constante. La existencia de estos protocolos demuestra que, en la práctica, los periodistas no confían plenamente en la protección legal que el derecho internacional les promete, justamente porque deben cuidar de sí mismos y de sus colegas, ya que su oficio los expone a incidentes inherentes a la cobertura de las noticias y amenazas de personas o facciones concretas.

Más allá de la vulnerabilidad física, el periodista de guerra sufre un daño psicológico y moral profundo, una “lesión moral” que lo convierte en una “víctima de la conciencia”. Este concepto, originalmente aplicado a los soldados, es perfectamente extensible a los reporteros. La “lesión moral” se define como el “desgaste del carácter moral” que ocurre al presenciar o ser cómplice de un asesinato injusto. El caso puntual del fotógrafo Kevin Carter, quien se suicidó tras ganar el Pulitzer por una foto que ilustraba la hambruna de Sudán, es un claro ejemplo histórico de este trauma, provocado por la inmensa angustia de su trabajo. El asesinato de un colega no es sólo una amenaza profesional, sino que representa una experiencia moralmente devastadora: el periodista que sobrevive no sólo es testigo de la noticia, sino que carga con una “baja de la conciencia” que regresa como una sombra de lo que antes solía ser. Este sufrimiento eleva la discusión de lo legal a lo estrictamente existencial, porque la guerra no sólo destruye cuerpos, sino que también corrompe el alma de aquellos cuya misión es reportar sus horrores, demostrando la fragilidad de la ética y la moral frente a la barbarie de la que es capaz el ser humano.

El análisis de la muerte de Anas al-Sharif y sus colegas de Al Jazeera nos revela que este trágico evento no es un incidente aislado, sino una manifestación de varias problemáticas filosóficas interconectadas. En primer lugar, la guerra moderna demuestra una tendencia peligrosa a no respetar los principios del ius in bello, especialmente el de discriminación, cuando puede redefinir la realidad a su conveniencia. La justificación de un ataque a un civil, simplemente re-categorizándolo como un combatiente, vacía de su significado a toda la estructura del derecho internacional humanitario.

En segundo lugar, la figura del periodista de guerra encarna una paradoja trágica: está protegido por la ley, pero opera en un entorno donde esa ley es regularmente violada. Al presenciar la violencia y la injusticia, el reportero sufre esa “lesión moral”, un daño profundo al alma que demuestra que la guerra mutila por igual los cuerpos como las mentes de quienes se atrevan a enfrentarla para contar su historia.

Finalmente, la “guerra de narrativas”, algo tan posmo progre y tan perverso, que busca activamente fabricar la indiferencia, un mal moral que socava a toda acción colectiva. La proliferación de relatos contradictorios tiene como objetivo confundir a la audiencia global, generando escepticismo y apatía, lo que permite que la violencia continúe sin ser castigada.

En última instancia, queridos lectores, el ataque asesino sobre los periodistas en Gaza no fue sólo un crimen de guerra, sino un ataque epistémico y moral. Fue un asalto a la posibilidad misma de una verdad objetiva y compartida en tiempos de conflicto. La muerte de la verdad precede a la muerte de los inocentes. Y la filosofía, en este contexto, no puede permanecer neutral. Su tarea es desmantelar las justificaciones simplistas, exponer las contradicciones morales y recordarle a la humanidad que la verdad, y quienes la buscan, son el primer y último baluarte contra la barbarie. La labor de los reporteros de guerra, al exponer los horrores del conflicto, es el antídoto más poderoso contra la indiferencia, que es tan asesina como cualquier arma del arsenal disponible de cualquier ejército. Su trabajo, y el sacrificio que a menudo conlleva, nos obliga a plantear una ética de la no-indiferencia, donde el conocimiento se convierte en la base para la acción moral.

El autor es docente, escritor y filósofo
San Juan - Argentina (2025)